Un sabotaje retrasa aún más la instalación de las cámaras de vigilancia en Topete

Tras casi cuatro años de espera, la previsión era activar los dispositivos antes de acabar el año


Esta vez no han sido “problemas técnicos” ni la burocracia, sino un acto vandálico, lo que va a dejar a los vecinos del entorno de Topete sin sus esperadas cámaras de vigilancia al menos unas semanas más. Hace unos días alguien cortó los cables de la instalación que se estaba llevando a cabo en ese momento, según desveló una vecina en una charla con los operarios, que relataron el sabotaje. Después de más de tres años, el Ayuntamiento preveía activar los 19 terminales en la zona de Bellas Vistas antes de finalizar el año.

Tanto fuentes de la Junta Municipal como un portavoz del Área de Seguridad y Emergencias han confirmado que el sabotaje se ha producido por un corte de cables del suministro de energía en la instalación, un “acto vandálico que vuelve a demostrar la necesidad de instalar cámaras de videovigilancia en la zona, como llevan pidiendo los vecinos desde hace años y como el actual equipo hará", han añadido a Europa Press desde el Área que dirige Inmaculada Sanz.

El pasado lunes día 14, los técnicos de la instalación observaron estupefactos cómo alguien había cortado intencionadamente los cables que habían estado colocando tan solo unas horas antes. Según explicaron, era la segunda vez que tenían que cablear la instalación, por el mismo motivo.

Cerca de cuatro años de espera

El proyecto para la instalación de cámaras en Bellas Vistas prevé la colocación de 19 dispositivos con los que se pretende atajar la delincuencia y los problemas de convivencia de la zona. Los terminales se distribuirán de la siguiente forma: siete en Topete, tres en Tenerife, dos en Navarra y Castilla, y uno en Santa Juliana, San Raimundo, Carolinas, Alvarado y Carnicer.

La propuesta para colocar dichos dispositivos fue aprobada en el Pleno de Tetuán en marzo de 2017, y siete meses después, en el Pleno de Cibeles. Desde entonces, los retrasos para llevar a cabo el proyecto han sido la tónica, especialmente con el anterior equipo de Gobierno municipal, algunos de cuyos concejales no estaban de acuerdo con la actuación.

En septiembre de 2019, el nuevo Ejecutivo liderado por José Luis Martínez-Almeida aprobó una inversión de 2,1 millones de euros para instalar estas cámaras tanto en el distrito como en Puente de Vallecas, y el pasado 3 de junio se firmaba el contrato para su ejecución.

Las obras comenzaron a finales de agosto, con las canalizaciones en Topete y calles aledañas por las que debía transcurrir el circuito de los dispositivos, con la previsión de que pudieran estar listas el pasado noviembre.

Al final su activación no ha llegado en noviembre y, tras el sabotaje, tampoco lo hará previsiblemente durante este diciembre, dejando a los vecinos una vez más a la espera, y también –a muchos de ellos– más convencidos de la necesidad de su instalación. 

Foto: @MJoseTopete


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