En primera línea haciendo frente al coronavirus

Personal sanitario, trabajadores de la alimentación o Cuerpos de Seguridad trabajan para frenar la pandemia


Mientras todos estamos confinados en casa, saliendo únicamente para ir al supermercado, a la farmacia, al estanco o ya, poco a poco, a pasear y hacer algo de deporte, hay personas que se levantan cada día para enfrentarse cara a cara con el coronavirus. Son quienes están en primera línea: personal sanitario, trabajadores del sector de la alimentación, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado… ‘Tetuán 30 días’ ha querido conocer sus testimonios y experiencias en sus respectivos trabajos contra el virus.

Sanitarios implicados al 100%

Son los que están teniendo un contacto más directo con la pandemia, atendiendo a personas contagiadas, velando día y noche por su salud y por su recuperación, dedicándoles ese aplauso emocionado cuando les dan el alta o lágrimas cuando no han podido superarlo.

Es el caso de Aurora A., auxiliar de enfermería en el Hospital Universitario Infanta Sofía de San Sebastián de los Reyes y vecina de Tetuán, quien explica que trabajaba en una consulta de otorrino, “pero desde que los casos de virus se dispararon fui a reforzar el servicio de urgencias, porque todo estaba colapsado, con las plantas y las UCI llenas de pacientes. Incluso tuvimos que habilitar la sala de espera con tomas de oxígeno para poder atender a más personas”. Además, reconoce que “al principio no teníamos material adecuado ni estábamos preparados. Luego nos ha ido llegando y ahora ya disponemos de él, aunque estamos agotados y se trabaja con mucha tensión”.

Aunque ella no tiene el coronavirus, no esconde que “tengo miedo al contagio. Es muy difícil no contagiarse, porque estás constantemente poniendo mascarillas, tomando la tensión, el termómetro, cogiendo muestras de sangre a los pacientes y hay una lucha interna entre el miedo y la responsabilidad profesional”. De hecho, esta auxiliar de enfermería se ha ido de su casa, donde convivía con su madre de 82 años y su hijo, “por temor a contagiarles”.

Y para cuando salgamos de esta pesadilla, recomienda que se garanticen “unos recursos mínimos para la Sanidad, que haya reservas de material y de personal para poder contratar. Hay que ser previsores por si vuelve a suceder. Incluso deberíamos hacer cursos sobre cómo afrontar pandemias de este tipo, saber trabajar en equipo en estas circunstancias, para que haya gente preparada que sepa dirigir y coordinar una situación como esta”.

Detrás del mostrador

La alimentación es uno de los sectores que tiene abiertos sus establecimientos, al ser un bien de primera necesidad, ahora y siempre. Darío Cofre es franquiciado de una cadena de supermercados en la calle de Villaamil. Desde su punto de vista, esta realidad “se vive con mucha incertidumbre debido a lo desconocido. Al principio pasamos unos días muy complicados en muchos sentidos, y aunque nos hubiese gustado pasar el confinamiento junto a los nuestros, sin tener que exponerles cada día, sabemos que somos un sector imprescindible y a la vez poco valorado”.

En relación con las medidas de choque implantadas en su local, afirma que “el personal lleva guantes, mascarillas y geles de desinfección, y a nivel tienda hay diversos carteles informativos, señalización de distancia y limpieza con desinfectante, todo en teoría, porque muy pocos clientes son respetuosos con estas normas”.

Y respecto a los productos que más se compran, aclara que “han ido variando según las semanas; las primeras fue el papel higiénico, no sabemos por qué, luego las lejías, harinas y levaduras, y lo último son las pipas”. A su vez, explica que “se repone a todas horas del día. Se reciben camiones a diario, incluso algunos días dos, y a veces es insuficiente”.

Manteniendo el orden

Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad también desempeñan su labor profesional en primera línea, velando para que se cumplan las normas decretadas por el estado de alarma. Es el trabajo de la Policía Municipal de Tetuán, cuyo intendente jefe de la Unidad Integral del distrito, Andrés Altamirano, asegura que “nuestra misión se centra, sobre todo, en ayudar y colaborar con vecinos y comerciantes, resolviendo sus dudas respecto a qué actividades pueden realizar y cuáles no, en esta situación tan excepcional que estamos viviendo y que afecta a la movilidad”. Además, subraya que “la gente está actuando con sentido común y está colaborando. Ponemos alguna denuncia, pero es algo anecdótico. Desde luego en Tetuán los vecinos se están adaptando y amoldando a esta realidad y la presencia de personas en la calle es la mínima e imprescindible. Sin duda, es un gran distrito, que ha asumido la responsabilidad que tenemos ante la pandemia, y cuando la superemos lo seguirá siendo”.

A la hora de valorar el trabajo que desempeñan, no duda en afirmar que “tenemos que estar en la calle y por eso contamos con unos protocolos de seguridad muy estrictos para prevenir el contagio”. A su vez, resalta que “estamos en contacto permanente con la Comisaría de Policía Nacional de Tetuán, para estar coordinados y llevar a cabo acciones conjuntas”.

En definitiva, estos son algunos de los profesionales que están trabajando en primera línea cada día, cuidando de nuestra salud, alimentación y seguridad. Desde estas páginas, gracias a todos ellos y un aplauso sincero. 


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