Habrá menos autobuses en las líneas 44 y 49 de Tetuán

También se suprime el “búhometro” y cambian varias rutas nocturnas

Hasta 22 líneas de autobuses han recortado sus servicios en Madrid desde el pasado 30 de septiembre, con la supresión de un vehículo por recorrido, lo que provocará un incremento del tiempo de espera de casi cinco minutos. Un ajuste que afecta al distrito en líneas como la 49 (Plaza Castilla-Arroyofresno) y la 44 (Callao-Marqués de Viana), y que el concejal del Área de Medio Ambiente y Movilidad, Diego Sanjuanbenito, justifica en el “descenso del número de viajeros”, que en algunas líneas se ha situado entre el 10% y el 20%.

La medida ha suscitado las críticas de la oposición, que considera los recortes “un ataque a un servicio público que usan numerosos ciudadanos, especialmente trabajadores y personas de edad avanzada”, como ha explicado el concejal del PSOE, Alberto Mateo. Según el portavoz de los socialistas en el distrito, “para los vecinos de Tetuán el 49 es un autobús de referencia, ya que recorre gran parte de Valdeacederas y nos une con el Barrio del Pilar”, y recomienda al Consistorio que “si quiere que aumente el número de viajeros, bajen el precio de los billetes”. Por su parte, Raquel López, concejal de IU en el Ayuntamiento, ha tachado la medida de “ataque al derecho al transporte público”.

Sin “búhometros”

Pero el descenso en la frecuencia no es el único cambio que los usuarios notarán a partir de ahora, ya que el Ayuntamiento y la Empresa Municipal de Transportes han reestructurado la red nocturna de autobuses urbanos para “evitar duplicidades” y prestar “un servicio más eficiente”. Así, entre las novedades figura la supresión con carácter definitivo de la red de “búhometros” –que reproducía en superficie el recorrido de las líneas de Metro– y de las circulares en horario nocturno en fin de semana (NC1 y NC2); además, se modifican otras (N15, N17, N22 y N23) y se crean nuevas (N25 y N26).

Según el Consistorio, estas modificaciones tienen como objetivo “mejorar la accesibilidad en los distritos de Carabanchel, Usera y Tetuán”, si bien en lo que atañe al distrito únicamente se permutan los trazados. Así, desde ahora la línea N22 (Cibeles-Barrio del Pilar) cambiará su paso por Génova, Santa Engracia y Bravo Murillo para salir al paseo de la Castellana hasta Plaza de Castilla, y desde ahí retomar su ruta habitual por Bravo Murillo, Veza, Plátano, Arroyo y paseo de la Dirección (a la vuelta, por Capitán Blanco Argibay). Por su parte, la N23 (Cibeles-Montecarmelo), sufre la modificación contraria, pasando de circular por la Castellana a hacerlo por Génova, Santa Engracia y Bravo Murillo.

David Álvarez de la Morena