Fundación Madrina celebra sus 25 años con una entrega solidaria en la Plaza de San Amaro

Más de 400 familias vulnerables recibieron en Navidad juguetes y alimentos en este enclave asistencial de la entidad

La Fundación Madrina desplegó el día de Navidad una jornada solidaria en la Plaza de San Amaro, donde más de 400 familias necesitadas recibieron juguetes y alimentos en el marco del 25º aniversario de la entidad.

Conrado Giménez, presidente y fundador de la Fundación Madrina, ha compartido una radiografía de la situación actual. Sus palabras no solo reflejan la magnitud logística de la Fundación —considerada por las auditorías externas como el banco de alimentos independiente más grande de España— sino el drama humano que late detrás de cada carrito de la compra. “La Plaza de San Amaro no solo ha sido el escenario de una entrega de juguetes y alimentos; ha sido el termómetro de una realidad que Madrid no puede ignorar”, señalan desde la entidad.

“Cada día repartimos 10 toneladas de alimentos porque la necesidad no descansa. En la Fundación acogemos a más de 500 familias nuevas cada mes, enviadas por servicios sociales y otras entidades. Son familias olvidadas, silenciadas, que viven prácticamente en la calle o hacinadas porque no pueden pagar un alquiler y alimentar a sus hijos al mismo tiempo”, ha declarado Giménez.

“Para una familia normal, lo que entregamos hoy supone un ahorro de unos 200 euros al mes. Pero para las familias numerosas, ese ahorro llega a los 400 euros, lo que representa prácticamente la mitad de un salario mínimo. Aquí sobreviven. Priorizamos la alimentación infantil —leche maternizada, papillas, potitos— porque un niño no puede esperar, pero también entregamos producto fresco, fruta y verdura de primera calidad. Por eso las familias piden venir aquí; porque saben que no les juzgamos, les alimentamos con dignidad”, añade el presidente de la Fundación Madrina.

25 años de ayuda en Madrid

La jornada solidaria ha coincidido con el cuarto de siglo de vida de una Fundación que, según señalan, no ha cerrado sus puertas ni un solo día durante estos 25 años. “Ni en los peores momentos de la pandemia, cuando el Ayuntamiento y la Comunidad nos pidieron ayuda para alimentar a todo Madrid, dejamos de entregar. Hoy las colas siguen siendo gigantescas y eso nos duele. España sigue siendo uno de los países con más pobreza infantil de Europa, y nosotros seguiremos poniendo nuestro grano de arena mientras haya un solo niño que pase hambre”, concluye Conrado Giménez.

El modelo de la Fundación Madrina cuenta con tres servicios de ayuda para las madres en riesgo de exclusión: Banco del Bebé (distribución de alimentación e higiene infantil), Hogares Madrina (acogida para madres jóvenes sin hogar) y Pueblos Madrina (una solución contra la despoblación que ofrece una nueva vida digna en el entorno rural).