Los distritos de Tetuán y Chamberí se enriquecen hoy con la apertura de Mercado Madriles Reina Victoria, un innovador espacio gastronómico ubicado en la Avenida Reina Victoria, 12, inspirado en mercados icónicos como el Mercato Mayfair de Londres o el Mercado Roma de México. Este proyecto de VP Hoteles y Ginkgo Restaurantes pretende redefinir la experiencia de "comer mercado" al unir la calidez de un restaurante con la diversidad de un bazar culinario. Javier Pérez Jiménez, director general de la compañía, lo describe como "un espacio con clase, pero para que lo disfruten los vecinos del barrio".
Desde las primeras horas de la mañana hasta la medianoche, Mercado Madriles ofrece un recorrido que abarca desayunos energéticos, almuerzos casuales, afterworks animados y cenas vibrantes. El obrador artesanal PAN.DELIRIO., galardonado por su Roscón de Reyes, lidera la oferta dulce y salada con panes recién horneados, tostas gourmet y repostería casera.
Tacos, baos, ensaladilla y cócteles de autor
El mercado está distribuido en cuatro puestos que representan un mosaico de sabores. Así, Taco Santo transporta a las calles de México con tacos de cochinita pibil, aderezados con cebolla encurtida y achiote, o quesadillas de carne al pastor; Kung Food invita a un periplo asiático mediante baos de pato asado con cinco especias o gyozas rellenas de pato y cebolleta china; para los adeptos al bienestar, Healthy Canalla propone platos frescos como salmón asado en costra de hierbas con lima o tartar de aguacate con pesto de almendras; finalmente, Tapeo Madriles rescata el tapeo castizo con clásicos como la ensaladilla rusa, patatas bravas crujientes o croquetas de jamón ibérico.
Complementando la gastronomía, dos barras elevan la experiencia: Gingko Bar, con una selección de cervezas artesanales y vinos, y la coctelería Gingko Cocktail, donde se reinventan clásicos como el mojito con técnicas innovadoras.
En el Hotel VP Sognio Metropolitano
Ubicado en el hotel VP Sognio Metropolitano, este mercado no es solo un lugar para comer, sino un enclave social. Estudiantes de Moncloa, profesionales de Azca o residentes de Cuatro Caminos y Chamberí hallarán en él un refugio versátil: un café matutino para recargar pilas, un vermú after work o una noche de copas en un ambiente urbano y acogedor. "Hemos querido unir las ventajas de un restaurante con las de un mercado", explica Pérez Jiménez.
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