El Día de la Infancia se traslada a septiembre por las elecciones

Por primera vez en 38 años no se celebrará en primavera

La concejala-presidenta de Tetuán saliente, Montserrat Galcerán, decidió unas semanas antes del 26-M trasladar al próximo 8 de septiembre el Día de la Infancia, que tradicionalmente se realizaba durante los meses de mayo o junio. El motivo no ha sido otro que la cercanía de las elecciones municipales. “Nos parecía conveniente sacar una fiesta infantil de tanta entidad fuera del calendario electoral que ha marcado la primavera de este año”, señalan fuentes cercanas a la Junta.

Por primera vez en más de tres décadas, la gran fiesta del distrito para los más pequeños no se celebrará en primavera. En un principio, desde la Junta Municipal se barajó celebrarlo algún domingo de junio –tal y como ya se hizo el pasado año por cuestiones meteorológicas–, si bien debido a la probabilidad de que durante este mes se produzca el Gobierno en funciones y el cambio de legislatura “se valoró que sería mejor trasladarlo a septiembre”, añaden.

El Día de la Infancia –o del Niño, como se llamó hasta el año 2016– se ha venido celebrando cada año durante los meses de mayo, lo que ha hecho coincidir la festividad con varios comicios. De hecho, se da la circunstancia de que en las dos últimas elecciones municipales, celebradas en 2015 y 2011, la festividad se celebró con apenas un par de semanas de antelación a las votaciones, si bien en aquellas ocasiones no se consideró que la cita infantil podría estar “marcada” por la política.

Por otro lado, cabe recordar las críticas que se produjeron en la Cabalgata de los Reyes Magos que tuvo lugar este año en el distrito, debido a la instalación de una gran pantalla junto al escenario real donde se proyectaban los “logros” llevados a cabo por el equipo de gobierno municipal.

El Día del Niño se celebró en Tetuán por primera vez en 1981. Tras 37 ediciones, esta festividad se ha convertido en el mayor evento de estas características que se celebra en la capital, con una asistencia que ronda las 200.000 personas, que pueden durante toda la jornada disfrutar de actividades lúdicas, culturales y deportivas y para la que se corta el tráfico de Bravo Murillo, la arteria principal del distrito.